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España será la economía de la Unión Europea (UE) que menos crecerá en 2011, con un magro 0,8 por ciento del PIB, frente a la pujanza de la economía polaca, que se expanderá un 4,1 por ciento, anunció hoy la Comisión Europea en sus últimas previsiones económicas de Bruselas. A pesar de que Bruselas revisó al alza el crecimiento del PIB español (en una décima) respecto a sus previsiones iniciales, ese número se queda muy lejos del 1,3 por ciento que calcula el gobierno español para 2011. Para España, Bruselas vaticina que «la demanda local seguirá débil este año porque el paro continúa en máximos históricos, la construcción residencial se ajustará todavía más, el proceso de desendeudamiento de hogares y empresas continúa y el sector público restringe el gasto en consumo e inversión». Medidas las economías de los 27 socios en su conjunto, la Comisión Europea prevé un crecimiento del 1,8 por ciento del PIB, lo cual equivale a una décima más respecto a las últimas previsiones económicas de otoño del ejecutivo comunitario. Para los 17 socios de la eurozona, Bruselas apunta a un crecimiento del PIB del 1,6 por ciento en 2011 (una décima por encima de lo previsto).Para los países europeos que comparten la moneda única, la previsión de inflación para 2011 es del 2,2 por ciento, sensiblemente por encima del 1,8 por ciento incluido en las previsiones de otoño.
Ello significaría que el país, de dimensiones geográficas similares a España y con una cifra de población también similar, habría dado un verdadero salto adelante desde que se incorporó, en 2004 (junto a otros nueve socios, gran parte del Este de Europa) a la Unión Europea (UE).