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Tres empresas de las provincias de Pichincha, Santa Elena y Napo ganaron el concurso del programa CreEcuador, organizado por el Ministerio Coordinador de la Producción, en la fase de inversión. Los nuevos empresarios de la fase de inversión recibirán en total $ 4 millones no reembolsables.

12 diciembre, 2011 @ 8:46
publicado por Freddy

La última concesión para las telefónicas Claro (Conecel) y Movistar (Otecel), concedida en agosto del 2008, deja hasta el momento un saldo positivo para ambas empresas. Según Rubén León, secretario nacional de Telecomunicaciones (Senatel), hasta diciembre su facturación conjunta en estos años alcanzó los $ 5.340 millones.

Mediante un comunicado para justificar la renegociación realizada por este Gobierno, el funcionario señaló que las inversiones de las dos compañías suman $ 1.185 millones y que los gastos de operación llegan a $ 3.500 millones.

Claro es la proveedora de servicio celular más grande del país con 11 millones de líneas en el mercado; mientras que Movistar cubre alrededor de 4,5 millones. En el 2008, las dos concluyeron una renegociación que el Gobierno actual calificó como “sin precedentes” y beneficioso para el Estado.

Pero frente a la facturación lograda por las telefónicas –que tienen más líneas vendidas que el número de habitantes de todo el país–, el pago desembolsado por sus respectivas concesiones aún es bajo respecto de sus millonarios ingresos.

Un informe del director de Gestión de Servicios de la Senatel, Christian Rivera, que fue enviado el pasado 8 de noviembre a la Asamblea, muestra que entre el 2008 y el 2010 estas empresas ya se acercaban a los $ 5 mil millones en ventas: Claro con $ 3.431 millones facturados y Movistar con $ 1.431 millones.

Las cifras, difundidas por Rubén León el 6 de diciembre pasado, revelan que Claro y Movistar han generado para las arcas fiscales $ 500 millones por derechos de concesión, $ 100 millones por uso de frecuencia, $ 400 millones por Impuesto a la Renta y $ 33 millones por pagos al Fodetel. En total: $ 1.033 millones, la quinta parte de lo que lograron por facturación.

Las estadísticas de León se publicaron para aclarar las críticas al desbalance entre las ganancias de Claro y Movistar frente a su aporte al Estado, dueño de las frecuencias concesionadas por quince años (2008-2023). Uno de los críticos es Fernando Villavicencio, exsindicalista petrolero y dirigente del opositor Polo Democrático, quien acusó al Gobierno de utilizar a El Telégrafo, controlado por la Secretaría de Comunicación, de ocultar que la mayor parte de ingresos de las telefónicas durante su operación en Ecuador (desde 1993) se registra tras la renegociación del 2008.

El pasado 26 de noviembre, durante el enlace sabatino, el ministro de Telecomunicaciones, Jaime Guerrero, pronosticó que los ingresos para el Estado en los quince años de concesión serán de unos $ 1.400 millones. A lo que Villavicencio respondió que solo en el 2010 las ventas de las telefónicas fueron de $ 1.759 millones.

Para Guerrero, antes de que la Revolución Ciudadana llegue al poder y según “investigaciones especializadas”, de las que no citó nombres, hubo un perjuicio de $ 4.000 millones.

Esta cifra es parte del informe preparado por El Telégrafo, en el que cita que la consultora Gurovich & Asociados hizo un estudio que habría permitido determinar una pérdida para el Estado de $ 4.477 millones y sugerido “la revisión urgente” de los contratos. La consultora, no obstante, aclaró al día siguiente: “No tuvimos ocasión de estudiar las distorsiones que hubiese podido haber en contratos anteriores… con operadoras de telecomunicaciones, y por ende menos pudimos recomendar la revisión de los contratos de concesión”. El presidente Correa se basó en esa información para acusar a El Comercio, EL UNIVERSO y Ecuavisa de participar de ese negocio, cuando los tres medios un año después de la primera concesión, la de 1993, vendieron su participación en Otecel.

Correa, en ese enlace, señaló que la negociación del 2008 fue beneficiosa para el Estado y para Conecel, cuyo nombre comercial en ese entonces era Porta. “Si yo fuera ejecutivo de Porta, si el negocio me ha dado utilidades de $ 259 millones en el 2007, y lo que está pidiendo el país es dos años de utilidades…, en dos años recuperarían lo que han pagado, no lo pensaría dos veces”, señaló Correa.

Este Diario solicitó una entrevista con el ministro Jaime Guerrero, quien también es presidente del Conatel, para que amplíe la posición y políticas del régimen frente a las ganancias y gastos de las telefónicas, pero no hubo respuesta.

Cronología

10 de agosto de 1992
Se expide la Ley de Telecomunicaciones que permite la concesión al sector privado del servicio de telecomunicaciones celulares.

19 de abril de 1993
Se expide el reglamento para el Servicio de Telefonía Móvil Celular. Las empresas que tuvieron los primeros lugares fueron Conecel y Otecel.

1994
Es el año en el que empiezan a funcionar las empresas Conecel con su servicio Porta Celular y la empresa Otecel con Celular Power.

20 de septiembre de 1996
El Conatel autoriza a Senatel renegociar los contratos con las concesionarias de telefonía celular.

Diciembre de 1996
Otecel inicia las negociaciones con Bellsouth Internacional y en marzo de 1997 toma el control de Celular Power.

Mayo de 1998
Bellsouth y Conecel cuentan con 200 mil usuarios.

Octubre del 2006
Se aprueba modelo tarifario para operadoras a partir del 2008 cuando se suscriban los nuevos contratos.

Agosto y noviembre del 2008
Se suscriben los nuevos contratos de concesión con Porta y Movistar (antes Bellsouth), en su orden.

Fuente El Universo

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