Estadísticas de la Dirección Nacional de la Policía Judicial refieren que la extorsión creció en un 230% en Pichincha en un año. En el 2009 se reportaron 75 casos, frente a 173 registrados en el 2010. En este último año hubo 401 denuncias a escala nacional. Las provincias con mayor incidencia, después de Pichincha, fueron Guayas con 87 casos, Esmeraldas con 22 hechos, El Oro con 30 y Manabí con 20. El norte del país es una zona vulnerable a la extorsión. Según Inteligencia, allí operan agrupaciones y personas que utilizan los nombres de los Grupos Ilegales Armados de Colombia (GIAC). Los ganaderos son los más afectados por esta clase de delito. Una persona vinculada a este sector indicó que los productores de carnes y leche del Carchi y el norte de Imbabura han vendido sus haciendas para evitarse problemas. En febrero del 2009 se determinó que la aparición de bandas de extorsionadores en los límites fronterizos entre Carchi y Sucumbíos podría relacionarse con los grupos narcotraficantes de Los Rastrojos y Nueva Generación. ¿Existe relación entre la extorsión y el secuestro? Vicente Reinoso, fiscal de Delitos contra las Personas, considera que la figura de los dos delitos es casi la misma. A su juicio, a través de la extorsión se solicita dinero a cambio de amenazas o actos de violencia, mientras que en los secuestros se hace lo mismo privándole de la libertad a una víctima.