Indicadores macroeconómicos más bajos se analizan para la pro forma
Los supuestos macroeconómicos de la pro forma 2012 enfrentarán un representativo decrecimiento frente a los indicadores de este año, según las directrices para la propuesta del Presupuesto General del Estado publicado en la página web del Ministerio de Finanzas.
El documento que experimentará cambios hasta finales de octubre y quedará definitivo en noviembre –60 días antes del año fiscal siguiente– para enviarse a la Asamblea tal como dispone la ley, revela que la economía crecerá en 4,20% frente al 5,24% estimado para el cierre del 2011, debido al incremento de las importaciones de combustible y un ligero repunte de las exportaciones de crudo.
El próximo año, según anuncios del Ministerio de Recursos Naturales, la refinería de Esmeraldas, la más importante del país, apagará motores por casi nueve meses, lo que implica la nula producción de derivados y la trepada de productos como las naftas que se utilizan para la elaboración de gasolinas, diésel y gas de uso doméstico.
De acuerdo con las directrices de Finanzas, las importaciones de derivados para el 2012 subirán de 39,2 millones a 47,7 millones de barriles, pese a una proyección de precio de $ 111,9 el barril de producto adquirido, mientras que estima comprar cada barril de crudo en $ 93,10. No obstante, ese valor puede modificarse en los siguientes dos meses.
Las cifras, aunque preliminares, no brindan seguridad, según Jaime Carrera, del Observatorio de la Política Fiscal. A su criterio, esos números no son sostenibles a mediano plazo y más si existe déficit fiscal con endeudamiento hasta el 2015.
Carrera cree que un escenario prudente en medio de una crisis internacional que afectó a materias primas como el petróleo debería pronosticar indicadores con un precio de exportación de crudo de entre $ 60 y $ 65 por barril, y sobre ese valor establecer una disciplina fiscal de no gasto excesivo para controlar los ingresos que surjan.