Los límites en la proyección de gastos obligan a usar facturas
Los controles en el Servicio de Rentas Internas (SRI) se intensificaron en la proyección de gastos personales. El cambio de medición y la fijación de máximos para cuatro rubros evitaron, según las autoridades, que se disparen los pedidos de deducción del Impuesto a la Renta.
El Departamento de Control del SRI creó una fórmula para que la deducción de vestimenta, educación, alimentación y vivienda no exceda los $ 2.993. La medida es una solución ante pedidos de devolución sin sustento. Es decir, sin facturas.
En Rentas aún no se hacen estimados de las variaciones que la medida implicará en las declaraciones de los contribuyentes en relación de dependencia. Cualquier evaluación se determinará a finales de este mes, cuando termine el plazo de presentación de proyecciones. David Veintimilla, técnico del Servicio de Rentas, dijo que hasta 2010 muchos pedidos se hacían sin respaldo real (comprobantes) para alcanzar el máximo deducible. La Dirección Nacional enviaba un listado de anomalías a las direcciones regionales y estas debían verificar los datos proporcionados por el contribuyente.
Ahí surge la ventaja del sistema: la exigencia de facturas. Los comprobantes son el único respaldo para la deducción de gastos y aumentan la declaración del IVA. La proyección de gastos personales es uno de los motivos por los cuales ese tributo pasó en operaciones internas de 1.398 millones de dólares en los primeros ocho meses de 2009, a 2.014 millones en el mismo periodo de 2011.
El buen resultado de la fijación de parámetros es estudiado para otros trámites. En la devolución de impuestos, el Servicio de Rentas analiza mecanismos de control que eviten el crecimiento desmedido en el sector público. En general, de enero a agosto de este año se devolvieron $ 701 millones. En el mismo plazo de 2010, la cifra llegó a 251 millones.
Fuente El Expreso